The WWF is run at a local level by the following offices...
- WWF Global
- Adria
- Argentina
- Armenia
- AsiaPacific
- Australia
- Austria
- Azerbaijan
- Belgium
- Bhutan
- Bolivia
- Borneo
- Brazil
- Bulgaria
- Cambodia
- Cameroon
- Canada
- Caucasus
- Central African Republic
- Central America
- Chile
- China
- Colombia
- Croatia
- Democratic Republic of the Congo
- Denmark
- Ecuador
- European Policy Office
- Finland
Una ciudad resiliente es aquella que, sin dejar de lado aspectos de accesibilidad y bienestar económico, se encuentra en armonía con el medio ambiente. Además, es aquella que está preparada para responder a todo tipo de obstáculos, evaluando, planeando y actuando con anticipación ante los riesgos y consecuencias del cambio climático. Esta preparación le permite proteger a sus habitantes y evitar posibles interrupciones en su desarrollo, fomentando así un entorno positivo.
Por lo demás, una ciudad resiliente tiene la capacidad de adaptarse a los cambios y mitigar el impacto ambiental para cuidar el planeta, por lo que debe conocer sus zonas de riesgo, prevenir y evitar la contaminación del subsuelo, los cuerpos de agua y los mares.
¿Por qué las ciudades?
El último reporte del IPCC (Intergovernmental Panel on Climate Change) de las Naciones Unidas lanzado en 2022, sobre impactos, adaptación y vulnerabilidad, muestra que el cambio climático afecta especialmente a las poblaciones urbanas vulnerables, por lo que garantizar que las ciudades sean resilientes es esencial.
De acuerdo a estudios de WWF, en las ciudades los problemas relacionados con emisión, contaminación y deshechos, entre otros, tienden a multiplicarse. Sin embargo, algunas de las acciones más ambiciosas e innovadoras para abordar los desafíos de la sostenibilidad, también se desarrollan en ellas. En este sentido, trabajar en medidas contundentes de mitigación y adaptación al cambio climático en espacios urbanos, tiene el potencial de generar una importante reducción de emisiones, permitiéndonos seguir enfocando los esfuerzos en la protección de los ecosistemas prioritarios.
Ciudades bajo presión
Los estilos de vida cada vez más urbanos ejercen presión sobre los ecosistemas, contribuyendo así al cambio climático. El creciente apetito de una gran variedad de alimentos, bienes consumibles y energía, están ejerciendo una enorme presión sobre la tierra, las aguas y el clima del mundo. Se estima que al 2050 la población urbana podría duplicarse hasta alcanzar los 6.7 millones de habitantes.
El foco en las ciudades es importante ya que el 55% de la población vive en ellas (casi 80% en América Latina y el Caribe); el 80% del PIB (Producto Interno Bruto) mundial se genera en las ciudades; y el 70% de las emisiones de CO2 del mundo proviene de las mismas. La buena noticia es que hoy existen soluciones innovadoras y de recursos efectivos que pueden cubrir las demandas de los estilos de vida urbanos sin agotar la capacidad ecológica del planeta.
¿Cómo mejorar nuestras ciudades?
De acuerdo con la visión de WWF, las ciudades son reconocidas como actores centrales en un futuro resiliente al clima, donde las personas vivan en armonía con la naturaleza.
Las ciudades tienen recursos y capacidades adecuadas y están integradas a la planificación y a las políticas nacionales e internacionales que les permitan no solo actuar, sino también innovar y liderar hacia un futuro 100% renovable, equitativo y sostenible. De la misma manera, WWF se ha fijado como objetivo que para el 2025, las ciudades de todo el mundo actúen como catalizadores de transformación, implementando planes de acción inclusivos en línea con 1,5 ° C, garantizando al mismo tiempo, la resiliencia urbana y desbloqueando acciones climáticas colectivas (WWF, 2020).
WWF promueve y trabaja junto a los gobiernos locales y regionales a través de diversas iniciativas como el Desafío de las Ciudades y Amamos las Ciudades, que reconoce a los municipios líderes en la lucha contra el cambio climático; la promoción de alianzas entre actores sub nacionales y no estatales comprometidos por la acción climática; el desarrollo de proyectos para avanzar hacia sistemas alimentarios urbanos bajos en carbono; la promoción de la movilidad urbana sostenible y la implementación de Soluciones basadas en la Naturaleza en las ciudades.
En el año 2018, el Panel Intergubernamental sobre Cambio Climático (IPCC) demostró que, si no se controlan las alteraciones del cambio climático, el aumento de la temperatura podría alcanzar 2°C o incluso 3°C para 2050, afectando dramática la vida de las personas y el planeta. Alinearse con el Acuerdo de París y tomar medidas para limitar los aumentos de temperatura promedio a 1,5°C significaría una pérdida mucho menor de hábitats naturales, así como también de impactos en la salud humana y medios de vida.
Los proyectos desarrollados por WWF en colaboración con otros actores, apuntan a que las ciudades puedan mitigar y adaptarse a los efectos del cambio climático, alineándose con un aumento de temperatura inferior a 1,5°C y que logren la carbono neutralidad antes del año 2050.
Desafío de las Ciudades
El Desafío de las Ciudades de WWF (One Planet City Challenge - OPCC, en inglés), es una competencia bianual entre ciudades de todo el mundo para movilizar la transición hacia un futuro sostenible e impulsar la acción climática para cumplir con el Acuerdo de París.
La iniciativa diseñada y ejecutada por WWF consiste en que gobiernos locales reporten sus planes, programas y acciones de desarrollo urbano bajas en emisiones, en la plataforma de CDP-ICLEI, cumpliendo con un estándar internacional, público y transparente.
Un jurado de especialistas internacionales determina cuáles son las ciudades con los planes más ambiciosos, inspiradores y realizables, y otorga el reconocimiento a la ciudad ganadora del Desafío.
El Desafío de las Ciudades de WWF brinda la oportunidad a las ciudades, municipios y zonas metropolitanas de dar un ejemplo e inspirar al mundo.
Amamos las ciudades
El Desafío de las Ciudades considera una segunda etapa, denominada “Amamos las ciudades” (We Love Cities, en inglés), la cual consiste en una campaña ciudadana encargada de movilizar a la comunidad para votar por su comuna y también proponer mejoras en el ámbito ambiental y de sustentabilidad en la gestión local. Esta fase pública es lanzada con todos aquellos municipios que hayan pasado a la segunda etapa.
Chile participó por primera vez en esta competencia el año 2018, junto a las comunas de Independencia, Santiago y Valdivia, instancia en la que Independencia se adjudicó el galardón.
Por su parte, las ciudades chilenas que se sometieron a votación en 2022 fueron Renca, Providencia y Peñalolén, siendo Providencia la ganadora.
¿Cómo te mueves?
La manera en que nos trasladamos para realizar nuestras actividades diarias es un factor determinante a la hora de pensar en ciudades más resilientes, pues, por una parte, afecta directamente la calidad de vida de las y los ciudadanos y, por otra, la salud del planeta.
En la actualidad, según el Inventario Nacional de la Calidad del Aire, el transporte libera a la atmósfera 22.770 kilotoneladas de CO2 al año en Chile, el equivalente a dar casi 3000 vueltas al planeta Tierra en un automóvil estándar, siguiendo la línea del Ecuador. Esto se debe en parte al hecho de que el modelo de desarrollo de las ciudades chilenas se ha basado principalmente en la movilidad vehicular motorizada, lo que afecta directamente la manera en la que se desenvuelven las ciudades.
Adopta